Una compañera de D... andaba buscando casa en renta para cambiarse y hay una justamente al lado de la nuestra, así que pos, se anda mudando y será nuestra vecina.

D... Amablemente le ofreció mi troquita para poder transportar sus cosas y nuestra nueva vecina, aceptó el vehiculo y el chofer-cargador: Yo.

Fuimos ayer por la tarde a traernos las primeras cosas, en mi troquita, solo cupieron el "refri", la estufa y el "micro", bolsas con ropa y algunas cosas pequeñas como mesas de centro. Un señor que ella conoce era nuestro ayudante.

Esta mujer, T, tiene dos niños de cuatro y dos años, no tiene ningun pariente en Juárez (como mucha gente), tiene pocos conocidos y su marido vive con ella en temporadas, temporadas muy cortas con lapsos muy largos de ausencia. Parece que eso es lo que prefieren los dos, a mi me parece que no se aguantan y prefieren verse muy poco.

El caso es que anoche, apenas íbamos llegando con la troquita cargada cuando nos dice que se siente mal. Tiene seis y medio meses de embarazo y empezó a sentir dolores y contracciones, dejamos mi troquita encerrada en su cochera sin bajar nada, llevamos a sus niños con una amiga suya que afortunadamente vive cerca de donde estábamos y pisé el acelerador para llevarla al médico mas cercano, el nos dijo que estaba en "labor" de parto, que por el tiempo de gestación mejor la llevaramos al issste porque él no podía ofrecer los servicios que ella necesitaba.

Subimos de nuevo al auto y llamé al 060 solicitando ayuda, ellos me transfirieron a rescate y me dijeron que no podían ayudarme, mientras conducía llamé tambien a las ambulancias particulares y me dijeron que debía esperar un rato para cuando tuvieran una disponible, así que me olvidé de las ambulancias y pisé un poco mas el acelerador deseando que un tránsito me detuviera por exceso de velocidad pero parece que todos estaban demasiado ocupados, crucé casi toda la ave. Tecnológico entre 100 y 120 kph, me pasé casi todos los semaforos en rojo (tomando las suficientes precauciones para no agravar el asunto) y ya casi llegando a la clínica por fin me detuvo un oficial, le dije lo que pasaba y me escoltó las ultimas cuadras.

El servicio en el issste fue como era de esperarse, pesimo, en urgencias la tienen varios minutos de pie esperando que alguien la atienda, el de la recepción le hace mil preguntas, cuando llega por fin una enfermera repite la letanía de preguntas, la recibe el doctor y de nuevo la misma mecánica preguntativa y ella sintiendo que su bebé se le está viniendo.

La dejamos internada, regresamos por sus niños para llevarselos a una señora que se los cuida cuando es necesario, el fraccionamiento donde vive tal señora tenía varias partes anegadas y además D... no estaba segura de como llegar, así que estuvimos mucho rato perdidos hasta que por fin dimos con la casa y pudimos dejarlos encargados con la señora que los recibió bonito, se nota que les tiene cariño y eso nos dejó un poco tranquilos.

Regresamos de nuevo al issste, de extemo a extremo de la ciudad. Ya la tenían en "piso", con sueros, se sentía mejor y nos dió numeros de un hermano que tiene en Chihuahua y otro para llamarle a su mamá a Sonora y saliendo de la clinica hicimos las llamadas. El hermano anda el otro lado, la mamá dijo que va a buscar la manera de venirse lo mas pronto posible y el marido, quien sabe. Anda ahorita trabajando tambien en Sonora, la mamá de T le avisará lo que pasó pues ella sabe donde encontrarlo. Llegamos ya de madrugada a la casa, muertos de cansancio ocasionado por el estres.

Hoy he estado pensando que soy afortunado al no estar tan solo en esta ciudad y siento pena por todas las personas que por necesidad tienen que aventurarse y pasar momentos dificiles sin poder contar con el apoyo de la familia. Cuando lo hemos necesitado, de inmediato tenemos personas a nuestro lado para darnos apoyo, hasta ahorita que veo un caso de alguien solo, me he puesto a valorar todo lo que he recibido de quienes nos quieren a D... y a mí.