Ahora si... el sábado.

Posted by Renoreins

La carne asada se terminó temprano, como a las diez y media ya nos estábamos yendo los últimos y es que la noche empezaba a ponerse medio fría.

A pesar de no ser de Octubre, sino de Noviembre la luna estaba grandota, brillante y muy coqueta y se reflejaba perfectamente en la caguama recién sacada del hielo que nos dieron para el camino rumbo a casa de mis suegros.

Mis suegros y mis cuñadas se habían ido antes y ahora, Dama y yo íbamos solitos en el toyotita. Yo estaba cansado y no tenía ganas de tomar pero Dama sentía precisamente lo contrario.
-“Vamonos de borrachos solitos”
-A donde, ya es tarde y ando cansado
-N’ombre, apenas empieza la noche, yo si tengo ganas de tomar, tenemos una caguama y andamos cerca de aquella nogalera que de seguro recuerdas.

Enfilé hacia el este por la carretera a Rosetilla para complacer a mi querida mujer. Cuando llegamos a dicha nogalera, nos dimos cuenta que ahora tiene una cerca de malla difícil de traspasar. Mejor sin disminuir la velocidad seguí rumbo a una carretera vecinal que conocía desde que yo era un niño y mi padre me llevaba a visitar algunos ranchos agrícolas.

Encontramos un lugar claro entre pinabetes y a unos cuatrocientos metros de la carretera, primero hicimos pipí, dimos algunas vueltas alrededor del auto para conocer el lugar, luego pusimos música de los tigres y de intocable en el estereo, bajamos la caguama y dejamos que la piel se refrescara con el vientesito helado, por allí cerca se escuchaban los “cucurrucucús” de algunas palomas, muy pero muy a lo lejos se escuchaban gritos de alegría etílica y música norteña.

Nosotros nos quedamos abrazaditos junto al carro, platicando bajo la luna que iluminaba perfectamente los alrededores y al mismo tiempo hacía lucir macabros los pinabetes cada vez que se meneaban debido al suave viento de esa noche.

La caguama quedó vacía después de un rato pero a ella todavía le quedaba vuelo, así que regresamos al auto, tal vez era el ambiente o el frio, o que a través del quemacocos se miraba la luna, o el hecho de estar solitos después de una semana de estar acompañados en casa por mi suegra y mi cuñada, el caso es que una cosa llevó a otra, un besito a una manita, unos ojos a los otros y los otros a cerrarse y pos, recordamos “viejos tiempos”… un auto allá lejos de cualquier casa, una pareja enamorada, una noche romanticona, música y alcohol, y no creo necesario tener que dar mas detalles.

La actividad realizada requería recargar minerales así que fuimos a la “Carmen” a un conocido lugar donde venden las “clandestinas” a cambiar el envase vacío por uno lleno de líquido frío.

En lugar de regresar al lugar donde estábamos me dice:
-Hay un lugar muy bonito rumbo a Meoqui, tu no lo conoces porque yo lo conocí pero no contigo, ¿vamos allá? Te juro que no es porque extrañe a personas del pasado, sino porque el lugar me gusta mucho.

El pasado es el pasado, todo lo que ella vivió en algún momento sirvió para que sus pasos volvieran a mi, si algo debo agradecer a las personas de su pasado es que le hayan permitido descubrir que ella quería estar a mi lado, así que el pasado no me duele, ni me asusta, ni me incomoda. Yo se que es en ese lugar donde vio por ultima vez a quien fue mi rival, ella no me oculta nada ni trae guardados secretos, no quería que antes de casarnos “aquel” llegara con revelaciones incomodas así que lo desarmó adelantándose a confesarme algunos secretos de su anterior relación.

-Yo te llevo a donde tú quieras, ultimadamente, si yo soy tuyo y tú eres mía, el espacio donde estemos es nuestro.

Llegamos a un lugar, a un lado de un estrecho caminito rural cerca de un rancho, la entrada estaba entre el vado de Meoqui y la capilla de “San Juditas”. Un pequeño canalito a un lado, un sauce oscurecía el lugar y no permitía que la luna se filtrara cómodamente hasta nosotros, hacia un lado del camino había unos corrales con becerros y al otro lado una nogalera, abrí la caguama, bajamos del auto y me sentía divinamente cuando ella me abrazaba y llenaba sus ojos con las imágenes hermosas que la noche y el lugar nos ofrecían.

Platicamos no recuerdo ni que cosas, nos llenábamos el uno del otro y… ustedes imaginarán, ella sola, yo solo, el caminito solo…

Esperen… el caminito ya no está solo, una camioneta venía por el camino rumbo a donde estábamos nosotros, oculté la caguama a un lado del canalito y varios segundos después la camioneta se detuvo a unos metros de nosotros. Los faros me encandilaban así que me acerqué un poco y me situé al frente y a un lado del vehículo recién llegado mientras Dama se quedaba de pie junto a la puerta del toyotita.

Como lo sospeché era una camioneta blanca con torreta (apagada) en el techo y un escudo en la puerta. Bajó un joven uniformado y yo di unos pasos, le di la mano, pregunté si había algo mal, cruzamos algunas palabras, yo no traía aliento alcohólico, estaba totalmente vestido y mostraba seguridad en mis palabras, solo me pidió que buscáramos otros lugar porque ellos andaban cuidando las nogaleras, como es temporada de cosecha andan vigilando y tratando de evitar hurtos nuez. Comprendimos la petición ya que mi suegro también tiene nogales y tampoco nos gusta la idea de que alguien ande por allí cerca de noche.

Nos fuimos al vado de Meoqui a terminar de vaciar en envase de cerveza tamaño familiar, seguimos hablando de muchas cosas y cuando a ella comenzó a darle sueño nos fuimos a la casa a despertar a mis suegros, tomar café y comer unos panecitos que nos encontramos.

Ahh que buen sabado tuvimos! Y yo que quería llegar, cenar y dormirme.

This entry was posted on miércoles, noviembre 8 at 12:15 . You can follow any responses to this entry through the comments feed .

7 bloggeros dijeron

oye pues estuvo bueno el sabadito ehh Guamillas,con la media naranja por un lado y toda lo cosa no pues ahora si como dicen eso fue un good pass ¡¡¡ jejeje que bien por ustedes esos momento son bonitos.
sobre el mata ratas si que estuvo gacho pero lo mismo hubiera hecho yo es mi family.
Aproposito solicito de tu opinion en mi post hay le encargo cuando tenga chancesilla jejeje

noviembre 09, 2006 1:52 p.m.

hombre, pues que sabroso fin de semana...

noviembre 09, 2006 2:35 p.m.

Amiguito... que romantico!!!! y dejame decirte que, que hombre caray!!!.... así cual caballero de reluciente armadura.....
Dama debe estar orgullosa de tenerte a su lado... igual que tu a ella así tal cual los plasmaste!!!
Gracias por compartir algo tan bello con nosotros!!!
P:D Lástima lo de ella sola, yo solo, el caminito solo.....
y chin!!!! quedarte con todititas las ganas!!!! jajajajaja....

noviembre 09, 2006 3:04 p.m.

Aaaaaaaaaaaaauuuuuuuuuuuuuuuu!!

Qué buen fin de semana, carajo!!! Eso es vida!!

Y además con la mujer de tu vida, ni mandado a hacer!

noviembre 09, 2006 5:28 p.m.

Que padre sabado mi Reno, y si lo malo fue que la chota te corto la inspiracion, jejeje, me hiciste recordar una vez que la poli me corto la "inspiracion", les tuve que tirar un verbo y si, acusome, les di una lana para que se hicieran de la vista gorda, en fin .. historias.

Muy buen post, muy buen sabado.

Saludos.

noviembre 10, 2006 9:53 a.m.

Sr. Reno, al leer su post, se reactivó una zona de mi cerebro que estába dormida, olvidada, tiene mucha razón, todos somos el fruto de nuestras experiencias pasádas, todos tenemos nuestras historias que al final nos llevarón a donde estamos hoy, gracias por despertarme eso y enderezar mi actuar ante mi recién retornada mujer...
aaaa, y Felicidades por su sábado!

Saluts

noviembre 11, 2006 9:44 p.m.
Anónimo  

Suspiro.

noviembre 12, 2006 8:55 p.m.

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